El Futuro de la Biblioteca Marvel

Uno de los grandes anuncios de Panini de cara al 2023 ha sido el lanzamiento de la Biblioteca Marvel 2.0. Una noticia que ya se filtró días antes de cuando la editorial tenía pensado publicarlo, demostrando una vez más la malicia de algunos divulgadores. Pero mejor dejémonos de polémicas. Hay que reconocer que la recepción ha sido muy positiva y en ventas está arrasando en estas primeras semanas. Y hay motivos: es un material muy querido, la edición está muy cuidada y se nota el cariño que le han puesto desde Panini.

Como aspectos positivos a destacar, hay muchos. Por ejemplo, el papel escogido es perfecto para plasmar el color de la época. Al tratarse de un papel poroso absorbe mejor los colores y no da un resultado desagradable a la vista. Si miráis clásicos con papel satinado, os recomiendo poneros gafas de sol para que los fucsias y los colores chillones no os provoquen un ataque epiléptico. De esta manera, Panini consigue recuperar los clásicos con un papel de mayor calidad que el de hace 60 años, pero que termina siendo muy fiel en retratando el apartado gráfico y cromático.

Luego encontramos artículos muy interesantes y cosas como el correo de los lectores. A mí que me encanta todo el cotorreo y el salseo, me da la vida leer lo que opinaban los compradores de aquella época. Y seamos sinceros, algunos comentarios son graciosos de leer teniendo en cuenta en la franquicia multinacional que se han convertido los personajes de Marvel, pese a que haya algún fanático que demuestre no ser un Nostradamus al creer que en algunas cosas les llevarían al fracaso. Todo esto ayuda muchísimo a situarnos en aquellos años y vivirlos como si estuviéramos allí. Cuando Panini dijo que esto era una máquina de tiempo no se equivocaban.

Y por último está el precio. 12€ para un tomo en rústica con varios números está muy bien. Espero que lo mantengan durante unos años más, aunque es evidente que tarde o temprano van a terminar subiéndolos. Los precios de los cómics nunca bajan. Pero no todo va a ser bonito con esta edición. Mis inquietudes van a ir vertidas sobre el futuro de este formato, porque no sé qué ocurrirá una vez se diluya la euforia inicial.

Partamos de la base de que la mayoría de los jóvenes no están interesados en este material. A ver, sé que yo soy joven (aunque cada vez menos, 24 palos me caen en febrero) y siempre me han interesado los cómics clásicos. Pero lo que vende entre los chavales de hoy en día es el manga. Además de la separación generacional (para muchos estos son los cómics de sus padres y en algunos casos de sus abuelos), ni la forma de narrar, ni la temática, ni el arte guardan similitudes. Y aquellos que sí les gusten las películas de Marvel se darán cuenta que el UCM y los cómics son bastante diferentes. Así que probablemente (espero equivocarme) esto no creo que funcione en la mayoría de los adolescentes.

Por otra parte, el grueso de los aficionados que sí aman este material ya lo tienen. Y además lo poseen en el formato definitivo: el Omnigold. Siento que Panini empezó la casa por el tejado. Me explico: primero siempre se publican los tebeos en grapa y luego en el recopilatorio que queda bonito en la estantería. Esto es por el mero hecho de que así mucha gente se compra el material por duplicado. Pero claro, es que el Omnigold es la joya de la corona de las estanterías. Aunque sea más inmanejable, al final el precio sale igual o hasta más barato que los cuatro Bibliotecas Marvel que recopilan todo el material de un Omnigold. Y esta diferencia será mayor si hay nuevas subidas. ¿Quién va a malvender una tapa dura con 20 números de una colección que ya tiene completa para empezar esta? Sí, se perderán los correos de los lectores y los artículos, pero ese material ya lo tienen y en algo más lujoso.

Y luego otro tema. Van a salir 3 tomos mensuales, algo asequible para quien quiera hacerse todo. ¿Pero y los que no? ¿Cuántos años vamos a tener que esperar para llegar a la Patrulla-X de Chris Claremont? Y peor aún, ¿cuánto vamos a tardar en finalizarla? Seguramente algunas series si sobrevivan hasta el final, pero es un proyecto demasiado ambicioso, capaz de abarcar una década y con un lapso muy grande de tiempo entre los números de cada cabecera. Y teniendo en cuenta que con los Omnigolds se tiene a un paso tener ese material sin necesidad de esperar, no sé cómo aguantará. Mucha suerte a Panini más allá de esta euforia inicial. Quiero y deseo que dure porque varias colecciones me las quiero hacer en este precioso y cómodo formato.